Tāne es el dios de los bosques y de los pájaros en la mitología maorí.
Vivía, junto a sus hermanos, en el escaso espacio a oscuras entre Ranginui y Papatūanuku, su padre y su madre.
Uno de sus hermanos, frustrado por el escaso espacio que dejaba el abrazo de sus padres, le propuso matarlos. Él se negó y propuso una solución, separarlos.
Después de muchos intentos, Tāne consigue separar empujando con sus piernas a su padre( el cielo), y a su madre (la tierra).
Esta es la razón de que uno de sus hermanos, el dios de las tormentas y los vientos, se una a su padre en el cielo. Enfadado por la separación de sus padres azotará enfadado, y sin descanso, los bosques de Tāne con sus vientos.
Algunas leyendas dicen que Tāne creó al primer ser humano: Tiki
En Tahiti, Tāne es considerado el dios de la belleza y la paz.