Plan saludable después de tomar antibióticos

Este invierno, hay muchos casos de gripe y Covid. Después de recuperarnos, las bacterias aprovechan que nuestro organismo está debilitado y, en muchos casos, terminamos con otitis, faringitis, amigdalitis, etc.

Y en este momento, si es necesario, terminamos tomando antibióticos.

Los antibióticos salvan vidas y debemos tomarlos solo cuando es realmente necesario. No os preocupéis por sus efectos negativos, porque hay solución. En el artículo de hoy, os hablaré de qué hacer después de tomar antibióticos, creando así un plan para equilibrar nuestro organismo.

Tomar alimentos probióticos y prebióticos

Los antibióticos matan bacterias, tanto malas como buenas, por así decirlo. Nuestra flora intestinal se ve bastante dañada, porque la mayoría de los lactobacillus y un porcentaje muy alto de microbiota se lo carga el antibiótico, por este motivo es muy importante tomar alimentos probióticos, es decir, que contengan bacterias intestinales y alimentos prebióticos, que son aquellos que contienen fibra y alimento para esas bacterias y así poder fortalecer esas bacterias y mejorar la proliferación de estas.

Nuestra flora intestinal no solo es importante para ir bien al baño, sino que es esencial para asimilar bien todos los nutrientes, para fabricar vitaminas, minerales y neurotransmisores imprescindibles y para que nuestro sistema inmune funcione correctamente.

Hay muchos alimentos probióticos que podemos tomar de forma sencilla:

• Yogur ecológico. Mejor si es casero porque así nos aseguramos que las bacterias que hemos usado para la fermentación están vivas. También podemos hacer yogur de soja.
• Yogur vegano. Sí, se puede hacer yogur vegano. Podemos incluir fermentos especiales y conseguir el yogur que queramos.
• Derivados lácteos enriquecidos con “bifidus”.
• Chucrut. Un fermentado de col o remolacha. Mejor si lo haces en casa. Fácil, sano y barato.
• Chutneys. A mi me encantan, mi preferido es el de mango.
• Kéfir de agua y kéfir de leche.
• El té Kombucha. Si no sabes qué es la kombucha, puedes echar un ojo al artículo en el que hablamos de ella, pinchando aquí.
• Tempeh, alimento fermentado obtenido de la soja.
• Quesos frescos o mozzarella (queso crudo).
• Kimchi (plato de verduras fermentadas).
• Suero de mantequilla.
• Alimentos fermentados como el miso, el tofu, pepinillos en vinagre, pan de masa madre, etc.

También debemos tomar alimentos prebióticos (alimentos ricos en inulina y en FOS) que son los alimentos de las bacterias “buenas”.

• La alcachofa.
• El diente de león.
• El puerro.
• La remolacha.
• La achicoria.
• El ajo y la cebolla.
• Los espárragos.
• Granos integrales como los copos de avena.
• Nueces.
• Puerros.
• Miel.

Dependiendo de la situación de cada persona y el motivo de la toma de antibióticos, con el aporte nutricional no es suficiente y se necesita tomar preparados probióticos que se venden en herbolarios y farmacias, para repoblar de manera más eficiente la microbiota.

Los hay de muchos tipos; bacterias específicas para el intestino, bacterias específicas para la vagina, bacterias específicas de la saliva, etc. Se usan unos u otros según las necesidades de cada persona. Yo os recomiendo que los toméis siempre que hayáis tomado antibiótico al menos durante 3 semanas, así mejoraremos más rápidamente.

Depurar nuestro cuerpo

Lo primero que debemos hacer después de la toma del antibiótico y que la persona que esté recuperada de la infección, es comenzar a depurar nuestro organismo. Los antibióticos como otros medicamentos dejan residuos, estos residuos son perjudiciales para nuestra salud, por lo que resulta conveniente eliminarlos.

Podemos usar plantas medicinales para depurar sobre todo el hígado, ya que este estará bastante afectado por los fármacos: El cardo mariano, la alcachofa, el diente de león o el rábano negro son buenas opciones, podemos combinarlas con bardana, ortiga verde o cola de caballo para así también depurar piel y sangre. También podemos usar arcilla de uso interno y alga Chlorella.

Tenemos que tener en cuenta que la depuración no solo ayudará a eliminar estas sustancias de desecho, sino que al depurar, el organismo podrá recuperarse mejor y evitar futuras infecciones.

El pH de nuestro organismo se habrá acidificado por los antibióticos, por esto es importante llevar una dieta sana y equilibrada, libre de azúcares y alimentos refinados. Una dieta alcalina es lo más adecuado para devolver a nuestro cuerpo a su pH natural. Un buen ejemplo para lograrlo son los batidos verdes.

Mejorar nuestras defensas

Después de la toma de antibióticos nuestras defensas se quedan muy mermadas, en parte es por el daño que ha sufrido nuestra flora intestinal y porque el organismo ha estado combatiendo una infección. Apoyar a nuestras defensas es una manera de prevenir futuras infecciones, cosa que suele ser muy usual después de estar en tratamiento (suele pasar mucho a niños y ancianos) con antibióticos.

Podemos tomar plantas medicinales como la equinácea o el ginseng siberiano (eleuterococo). También podemos consumir alimentos como la jalea real, la miel o el polen. Disponemos de setas medicinales como el reishi (Ganoderma lucidum), shiitake (Lentinula edodes) y maitake (Grifola frondosa), que nos vendrán de perlas para mejorar nuestro sistema inmune. Y por supuesto, una dosis de vitamina C que siempre viene bien. Para obtenerla, podemos tomar frutas como la acerola, el escaramujo o el camu-camu (también vale la naranja o el kiwi como alimento más usual).

Si seguís este plan, veréis como os vais a encontrar mejor y sobre todo, vais a prevenir volver a padecer infecciones de repetición y recaídas similares.